Maquillaje paso a paso…
No olvides preparar muy bien la piel, usar el contorno de ojos antes de la crema, aplicar un ligero masaje y ponerte la prebase.
Después, sigue con el corrector. No pongas mucho producto y, aunque lo apliques con el pincel, después difumina con la yema del dedo suavemente, presionando con cuidado en vez de arrastrando el producto.
Aplica la base de maquillaje: tampoco abuses de ella. Si has utilizado el mismo tono que tu piel (cosa que deberías haber hecho si me has estado escuchando durante un tiempo ), no es necesario que bajes hasta el cuello. Difumina desde el centro del rostro hacia fuera, con movimientos suaves.
Matiza el rostro si lo necesitas, pero no abuses de los polvos tampoco, el aspecto que queremos conseguir es el de una piel jugosa no totalmente mate.
Con un colorete en tono marrón mate, dibuja el pómulo marcándolo justo debajo de tu hueso, y después con el colorete en crema da un toque al centro de tu mejilla y también difumina. Aunque los coloretes en crema son fáciles de aplicar con la mano, yo prefiero usar una brocha de base pequeña para extenderlo mejor.
Seguimos con los ojos: aplica el lápiz negro sobre el párpado, maquillando además entre las pestañas. Debajo del ojo y dentro ¡también!, y deja la zona del lagrimal limpia.
Ahora, con un pincel impregnado en sombra negra, difumina el lápiz hacia arriba, maquillando todo el párpado móvil. Ten cuidado y no te salgas demasiado. En el párpado inferior, utiliza un pincel fino y plano para poder difuminar (no hagas la línea demasiado gruesa o parecerá que estás cansada).
Debajo de la ceja, aplica un toque de sombra blanca nacarada y difumina hacia el lagrimal y la sien. A mí me gusta además aplicar un toque en la zona del lagrimal para abrir el ojo aún más.
Ahora, con un pincel impregnado en la sombra plateada, maquilla en el párpado móvil difuminando hacia arriba, sobre todo en la zona del hueso, para fundir la sombra negra y la plateada. Deja la zona de las pestañas negra. Si es necesario, vuelve a aplicar sombra y lápiz, así parecerá que tienes las pestañas más espesas.
Doble capa de máscara de pestañas y listo.
Hidrata muy bien los labios y aplica el brillo desde el centro hacia fuera.
Para iluminar, simplemente aplica un toque de iluminador sobre la mejilla y sobre las cejas y barbilla. Muy sutil, ya que toda la atención la tienen los ojos.
Ya has visto que el “paso a paso” es muy fácil. Ahora toca practicar…
No olvides preparar muy bien la piel, usar el contorno de ojos antes de la crema, aplicar un ligero masaje y ponerte la prebase.
Después, sigue con el corrector. No pongas mucho producto y, aunque lo apliques con el pincel, después difumina con la yema del dedo suavemente, presionando con cuidado en vez de arrastrando el producto.
Aplica la base de maquillaje: tampoco abuses de ella. Si has utilizado el mismo tono que tu piel (cosa que deberías haber hecho si me has estado escuchando durante un tiempo ), no es necesario que bajes hasta el cuello. Difumina desde el centro del rostro hacia fuera, con movimientos suaves.
Matiza el rostro si lo necesitas, pero no abuses de los polvos tampoco, el aspecto que queremos conseguir es el de una piel jugosa no totalmente mate.
Con un colorete en tono marrón mate, dibuja el pómulo marcándolo justo debajo de tu hueso, y después con el colorete en crema da un toque al centro de tu mejilla y también difumina. Aunque los coloretes en crema son fáciles de aplicar con la mano, yo prefiero usar una brocha de base pequeña para extenderlo mejor.
Seguimos con los ojos: aplica el lápiz negro sobre el párpado, maquillando además entre las pestañas. Debajo del ojo y dentro ¡también!, y deja la zona del lagrimal limpia.
Ahora, con un pincel impregnado en sombra negra, difumina el lápiz hacia arriba, maquillando todo el párpado móvil. Ten cuidado y no te salgas demasiado. En el párpado inferior, utiliza un pincel fino y plano para poder difuminar (no hagas la línea demasiado gruesa o parecerá que estás cansada).
Debajo de la ceja, aplica un toque de sombra blanca nacarada y difumina hacia el lagrimal y la sien. A mí me gusta además aplicar un toque en la zona del lagrimal para abrir el ojo aún más.
Ahora, con un pincel impregnado en la sombra plateada, maquilla en el párpado móvil difuminando hacia arriba, sobre todo en la zona del hueso, para fundir la sombra negra y la plateada. Deja la zona de las pestañas negra. Si es necesario, vuelve a aplicar sombra y lápiz, así parecerá que tienes las pestañas más espesas.
Doble capa de máscara de pestañas y listo.
Hidrata muy bien los labios y aplica el brillo desde el centro hacia fuera.
Para iluminar, simplemente aplica un toque de iluminador sobre la mejilla y sobre las cejas y barbilla. Muy sutil, ya que toda la atención la tienen los ojos.
Ya has visto que el “paso a paso” es muy fácil. Ahora toca practicar…
Me encanta (:
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